Los festivales masivos han vuelto a México, y Pa'l Norte tuvo el honor de inaugurar esta nueva etapa del entretenimiento en vivo del país.

Ya sabíamos que el acceso al público iba a ser rigurosamente controlado en esta primera edición de Pa'l Norte después de la pandemia y así fue, pues los estrictos controles sanitarios implementados por la organización impidieron que algunos casos positivos aislados que fueron detectados en el lugar ingresaran y pusieran en riesgo al resto de los asistentes, quienes en su mayoría se comportaron verdaderamente a la altura de las circunstancias acatando todas las medidas previamente anunciadas.

Fue así que el hermoso e imponente Parque Fundidora reabrió para recibir nuevamente a una multitud, formada ahora por decenas de miles de personas que llevaban esperarando más de año y medio para volver a vivir este tipo de experiencias, y que tenían altas expectativas de los artistas del cartel que respetó en gran medida el anunciado desde aquel 2020 .

Durante dos días la amplia variedad de propuestas, estilos y géneros musicales que tradicionalmente se mezclan en los muchos escenarios del festival lo hicieron una vez más para formar esa deliciosa y picante salsa sonora que bien le quedaría a la carnita asada tan del norte, dándole a la gente ese sabor a liberación que ya era justo y necesario probar entre trago y trago de cerveza.

Kinky, Enjambre, División Minúscula, Ed Maverick, Juanes, Galantis, Foster The People, y por supuesto, el tremendo poder de Foo Fighters fueron actos destacados del caluroso día viernes. Mientras que The Whitest Boy Alive, The Kooks, Boy Pablo, El Tri, Babasónicos y la espectacular presencia de Kevin Parker encarnando a Tame Impala hicieron que valiera por completo el boleto del frío sábado. Finalmente todos ellos y los demás artistas lograron que el gran león volviera a rugir ante su manada, prometiendo volver más pronto de lo que pensamos.

Fotos por Fer Vega.