Estamos a unos días de que el Palacio de los Deportes reciba uno de los conciertos más esperados por los fanáticos del llamado rock alternativo: Fall Out Boy y Jimmy Eat World, dos referentes del rock alternativo que se presentarán juntos en la Ciudad de México, siendo totalmente un combo ganador. Un concierto doble que promete ser un recorrido por sus grandes éxitos y también recordar la primera década del 2000 cuando estas bandas eran dominantes del género y con ello se convirtieron en influencia de bandas posteriores.

Formados en Chicago en 2001, Fall Out Boy irrumpió en la escena del pop punk con su álbum Take This to Your Grave de 2003, consolidando su popularidad con From Under the Cork Tree en 2005, lo que los catapultó a la fama global gracias a sencillos como “Sugar, We’re Goin Down” y “Dance, Dance”. En la actualidad la banda integrada por Patrick Stump, Pete Wentz, Joe Trohman y Andy Hurley continúa renovándose con su reciente disco So Much (for) Stardust de 2023, en el que parece retomar sus raíces sin dejar de innovar, combinando el sonido que los hizo populares con elementos más maduros y experimentales. La banda llegará a México después de presentarse en el Riot Fest de Chicago y esperamos una presentación larga, pues sus setlist están compuestos por más de 25 canciones.

Por su parte, Jimmy Eat World, fundada en 1993 en Arizona, es conocida por ser una de las pioneras del emo rock y el pop punk. Con el álbum Bleed American (2001), que incluye el icónico sencillo “The Middle”, lograron el reconocimiento internacional. Su sonido, caracterizado por la combinación de letras introspectivas y melodías contundentes, los convirtió en una referencia del género a inicios del siglo XXI.

A lo largo de su carrera, la banda liderada por Jim Adkins ha mantenido una sólida base de seguidores, en gran parte gracias a su consistencia musical y a su resistencia a los cambios bruscos de la industria. Su disco más reciente, Surviving (2019), muestra a una banda que sigue fiel a su esencia, explorando temas de autoconocimiento y resiliencia con una madurez que solo el tiempo puede otorgar. Aunque dado el tiempo que ha pasado desde su último lanzamiento, sí que necesitamos ya nueva música de Jimmy Eat World.