Pa'l Norte Virtual cumplió perfectamente con lo que un festival a la distancia debe ser, llegando a más de 500 mil personas en 20 países.

Desde que se anunció la primera edición (y tal vez la única) de Pa'l Norte en formato virtual, hubo mucha polémica y opiniones encontradas entre el público, derivadas de que para disfrutar de un festival como se debe es fundamental estar ahí. Sin embargo, dadas las condiciones al día de hoy, esto no es posible y por ello surgió está alternativa de darle a los amantes de los festivales un sábado de Pa'l Norte en casa para vivirlo con todas las libertades y limitaciones que esto implica.

Más allá del cartel variado que intentó ser lo más parecido a una edición del tradicional evento, estaba claro que la mayor fortaleza que vendió la edición virtual era el nivel de calidad en producción, cuyo objetivo era con ayuda de la pantalla verde, muchas cámaras y bastante software, lograr recrear la atmósfera ideal para ser transmitida a los dispositivos de quienes compraron su acceso. La iluminación, ruidos de fondo y escenarios necesarios fueron cuidadosamente trabajados para  llevarnos a pensar por momentos que este Pa'l Norte estaba sucediendo en vivo desde el mismísimo Parque Fundidora.

Fueron poco más de siete horas de transmisión que hicieron que este Pa'l Norte Virtual haya sido hasta hoy y sin duda, el streaming musical con mayor calidad que hemos visto en México durante la suspención de eventos presenciales. Cada uno de los artistas entregó sets completos y sin guardarse nada, totalmente acordes a un evento de esta magnitud, a pesar de en realidad estar tocando ante solo cámaras y rodeados de pantalla verde dentro de un estudio de grabación. 

La transmisión constó de tres escenarios musicales interactivos a disposición del usuario en los que se programó la actuación de artistas como Caloncho, Siddhartha, Drake Bell, Enjambre, Mon Laferte, Molotov, The Hives, incluyendo también sorpresas como Belinda y el tradicional toque norteño que no puede faltar a cargo de Intocable, además de una buena dosis de música electrónica con los tracks de Martin Garrix.  Al final los que pagaron por su acceso se llevaron una grata experiencia que no hace nada más incrementar las ganas de vernos nuevamente todos juntos allá afuera en el festival que promete volver más "Poderoso y ascendente".