Se realizó en Puebla una nueva edición del festival que llama a ser uno de los más importantes de México en el futuro inmediato.

Apenas es la tercera vez que Festival Catrina se lleva a cabo, pero ya se siente fuerte, la gran convocatoria de público así lo demuestra, y pese a seguir encontrándose con dificultades con el gobierno local, debido a las características de espacio religioso y cultural que es Cholula; los organizadores se han podido adaptar a los cambios de sede, logrando hacer un evento de primer nivel en lo musical que ofrece una experiencia completa al asistente poblano y foráneo; claro, aún hay muchas cosas por mejorar, sobre todo a nivel técnico en los escenarios.

El pasado 8 de diciembre el Parque Pirámide de Cholula en Puebla fue el recinto elegido para albergar al Festival Catrina en su tercera edición. Si fuiste desde Ciudad de México (esperamos que EL COLECTIVO TOURS MUSIC), la experiencia te debió haber sido aún más enriquecedora, pues desde carretera el imponente Popocatépetl daba la bienvenida con una intensa actividad volcánica colocada en Fase 2; pero una vez llegando al perímetro delimitado para el desarrollo del festival, justo a un costado de la gran Pirámide de Cholula y de su bello santuario de Nuestra Señora de los Remedios, el clima era ideal para vivir como se debe una larguísima jornada musical que estaba por comenzar.

Recordemos que Festival Catrina sufrió horas antes de las bajas de Omar Rodríguez y Le Butcherettes, las cuales se sumaron a la de Cuco, mismas que fueron suplidos de buena forma por los shows de Descartes a Kant y The Marias, respectivamente. Así, aún no siendo ni la una de la tarde esto ya había comenzado con bandas como Cállate Mark y Polaris. La gente de a poco iba entrando al lugar para acomodarse en su escenario preferido bajo un sol bastante fuerte que llegó a su punto máximo cerca de las tres de la tarde cuando Sabino y Lng/Sht hacían lo suyo juntos y en sus respectivos escenarios. Más tarde, Chetes, Porter y Chicano Batman se lucían con sets que nunca fallan, justo cuando la asistencia estaba por alcanzar el cupo establecido para el festival.

Cayó la tarde y el turno fue para Babasónicos, quienes se hicieron esperar por media hora para salir a tocar como la banda grande que son, ante ya una inmensa marea de gente que se desplazaba entre ellos y Fobia, una banda enorme que demostró tener todo para continuar por muchos años más, menos las ganas de querer hacerlo, sonando como en sus mejores años; con ellos llegó la noche y bandas como Hello Seahorse! y de acto sorpresa Caloncho le daban gusto a sus fans, mientras Café Tacvba salía entre rituales, agradecimientos a los pueblos de originarios de Cholula y éxitos a dar una de las mejores actuaciones de la noche.

La parte final comenzaba con la visita express de Weeezer con un Rivers Cuomo inspirado, relajado y vestido con su jersey del Veracruz para tocar los temas más conocidos de la banda y sus mejores covers, claro, África como estelar. Así siguió Jumbo y después los poco aceptados y a la vez los más esperados de la noche: Maná, quienes se hicieron dueños del festival por casi una hora, haciendo cantar a todos antes de que comenzara el ska con el emotivo y largo show de Inspector y la intensidad freak electro-rap de Yo-Landi y Ninja de Die Antwoord.

Catrina llegaba entera y desgastada a la media noche, y la gente comenzó la retirada masiva hacia sus transportes; solo quedando los que esperaban echar el baile con Mi Bnada el Mexicano y con Mago de Oz, ambos fueron los encargados de apagar las luces junto a sus contrastantes públicos y despedirse de la  siempre hospitalaria "Tía Catrina" hasta el próximo año, cuando miles la volvamos a visitar en su hermosa casa de Puebla.