El pasado 5 de abril The Killers ofreció el segundo de los conciertos programados en nuestro país como parte de su actual gira mundial.

Luego de visitar la ciudad de Monterrey, la banda de Las Vegas hizo escala en la Ciudad de México, ciudad que estaba impaciente por tenerlos de regreso. Así, en punto de las 6 de la tarde, el público cubierto con impermeables o las famosas bolsas de plástico, comenzó a ocupar el foro, esto bajo una lluvia que no cesaría por el resto de la noche.

El acto encargado de abrir el show estuvo a cargo de la multifacética St. Vincent, quien tomó por sorpresa incluso a quienes no sabían que estaría, ya que adelantó su show media hora respecto a lo anunciado, comenzando en punto de las 8 de la noche. La originaria de Oklahoma se guardo bastante, pues será estelar del festival Ceremonia, y ofreció un set algo discreto, muy corto pero encantador para un foro a media capacidad en ese momento.

Finalmente, poco antes de las 9:30 de la noche The killers comenzó con su actuación interpretando Wonderful, un instante que hizo que todos los que aún se encontraban ingresando apresuraran los pasos, llegando incluso a los tropezones.  "Bienvenidos a nuestro maravilloso show", fueron las primeras palabras en español de Brandon Flowers, quien junto al resto de la banda no paró de emocionar y extasiar a los presentes por casi dos horas. "Chilangos, los extrañamos mucho", fue otra de las frases con las que todos se rindieron ante la banda, misma que se lucio en cada uno de los temas, demostrando el poder en vivo del que son poseedores y el tremendo carisma de su líder, que de ser showman sabe mucho.

Una cascada de éxitos como The Man, Human, Spaceman, Read My Mind y otros que no suelen aparecer en sus sets como Just Another Girl, fue lo que The Killers compartió con los capitalinos esa maravillosa noche, la cual sirvió para cumplir el sueño de un fan que fue elegido para acompañarlos en la batería en el tema Reasons Unknow, convirtiéndose así en uno de los grandes momentos de la noche. Al final Brandon, vestido de dorado y diciendo "We love you" desaparecería mientras sonaban las últimas notas de Mr. Brightside.